La poesía épica se
caracteriza por sus autores anónimos. No hay grandes autores conocidos de esta
época literaria porqué las ideas del contexto histórico en que surge eran de
colectividad, conjunto, grupo. No había necesidad de destacar el nombre del
autor por encima de los demás. Éste factor sumado a la transmisión oral común
de los cantares hacía improbable el conocimiento de los autores, pasaban de
boca en boca y pocas veces eran escritos.
La producción épica española se ha perdido
casi enteramente. Sólo se conserva (aunque incompleto) el Cantar de Mio Cid y otros cantares como el de Rodrigo y el Cantar de
Roncesvalles, de los que se conservan algunos versos. Sin embargo, sabemos
de la existencia de otros cantares gracias a las crónicas de la época. Hay
noticias de un Cantar de los Siete
Infantes de Lara, Cantar de Bernardo del Carpio.
Cantar de Mio Cid
El
manuscrito conservado del Poema de Mio
Cid es la obra narrativa extensa más antigua escrita en una lengua romance.
Es una copia del siglo XIV, firmado por un tal Per Abat. Pero Ramón Menéndez
Pidal, máximo estudioso del Poema, afirma que la obra fue escrita en 1140
(cuarenta años después de la muerte del Cid) y que Per Abat fue el copista. El
texto del Cantar es, como ya hemos mencionado, anónimo (ya que las primeras
obras firmadas son del XIII). Algunos estudios basados en la toponimia y en los
rasgos dialectales del poema hacen que Menéndez Pidal asegure que el poema está
compuesto por dos autores: uno de San Esteban de Gormaz y otro de Medinacel.
Cantar
de Roncesvalles
El Cantar de Roncesvalles
es otro poema épico escrito en castellano medieval con características de romance navarroaragonés presuntamente compuesto
entre 1225 y 1250.
Tampoco se conoce el
autor y sólo se conserva parcialmente. Hay un fragmento de cien versos de los
5.500 que tenía el original según los estudios de Ramón Menéndez Pidal.
Cantar de Rodrigo o
Mocedades de Rodrigo
Es el nombre con el que conocemos
un tardío cantar de gesta castellano anónimo, compuesto alrededor de 1360.
Se conservan 1164 versos.
El único códice que transmite la obra es un manuscrito de 1400 que se encuentra
en la Biblioteca Nacional de París. Cómo la obra mancaba de título se le ha
atribuido después de su estudio el título de Cantar de Rodrigo o Mocedades de
Rodrigo.
Éste escrito describe los
orígenes y los logros de juventud del héroe legendario Rodrigo Díaz de Vivar.